Es bueno lamentar las oportunidades perdidas, pero es malo sentirse miserable a causa de ellas. El Señor nos promete estar con nosotros, y con Él adelante nos espera algo mejor, no te desanimes, sigue creyendo que Él premiará tu esfuerzo.
La Biblia dice: Los campos se llenarán de trigo, y los lagares de mosto y aceite. Yo les recompensaré a ustedes por los años que devoró la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta…y alabarán el nombre del Señor su Dios, que hizo maravillas por ustedes, y nunca más mi pueblo será avergonzado. Joel 2:25-26
EN DIOS NO HAY CAUSAS PERDIDAS, EN ÉL HAY OPORTUNIDADES PARA QUE SU GLORIA SE MANIFIESTE EN TI.