La completa confianza en Dios. Algunos consideran que la humildad es una debilidad, otros piensan que significa no hablar de uno misma o infravalorarse como persona y restar importancia a los propios logros. Los cristianos suelen confundirla con una baja autoestima, con creer que uno no debería considerarse digna, porque Jesucristo fue la única persona perfecta.
Sin embargo, cuando aceptamos a Cristo como nuestro Señor y Salvador, su vida se convierte en la nuestra. Ya no somos esclavas del pecado, sino que poseemos su justicia. Por tanto no tenemos que pensar que somos escoria. Vive hoy confiando por completo en Dios, sabiendo que serás capaz de aguantar las presiones que la vida te lanza, porque él es tu vida.
Lo que Dice La Palabra:
si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra. (2 Crónicas 7:14)
MI CONFIANZA ESTÁ EN DIOS.